Masaje Pizza

Para familias:  Juego MASAJE PIZZA 

Es probable que en los tiempos que corren nos falten ideas para pasar un rato divertido en familia, por eso, os presentamos esta dinámica, ideal para aprender a llevar la atención a las sensaciones que vamos sintiendo. Al mismo tiempo, es una bonita herramienta para agradeceros entre todos los miembros las cosas que hacéis los unos por los otros. Lo mejor de todo: la podéis realizar en cualquier momento. 

- Comenzar poniéndoos por parejas.

- Podéis ir masajeando en la espalda del otro/a diferentes ingredientes que simbolicen virtudes, aficiones que compartís, momentos vividos, etc.

- Podéis seguir añadiendo palabras bonitas que os recuerden a esa persona (por ejemplo, ?EURoeme gusta tu alegría, me gusta recordar el paseo que dimos el fin de semana, me gusta cuando vamos a jugar al parque juntos?EUR?, etc.). 

- Os animamos a realizar masajes que sirvan de agradecimiento por algo que esa persona haya hecho por nosotros, como por ejemplo, ?EURoeagradezco que siempre te levantes de buen humor, agradezco que siempre prepares la comida tan rica, etc?EUR?.  

Las madres y padres podéis recordar a los peques a respirar profundo y a estar atentos/as a lo que van sintiendo durante todo el juego. Se trata de involucrar a vuestros hijos/as en este ejercicio, y lo que más les ayudará para conseguirlo es vuestra presencia atenta en el propio juego. Es así como conseguiréis que vuestros hijos/as se sientan seguros/as, tranquilos/as y acompañados/as durante la dinámica. 

Las preguntas que vosotros/as les realicéis les pueden ayudar a darse cuenta de las diferentes sensaciones que van apareciendo. Pregúntales si sienten frío, calor, calma, tensión, cosquilleo, etc. Guíales para que puedan identificar esa sensación en su cuerpo, pregúntales si la sienten en la tripa, en la espalda, en los brazos, etc.  

Cuando terminéis de realizar el masaje, animad a los peques a compartir las sensaciones que han experimentado, para poder reconocer eso mismo que han sentido, ponerle nombre, y para que así ellos/as puedan aceptar lo que hayan sentido tal y como ha sido.